Formación económico-social que sucede al feudalismo. En la base del capitalismo, se encuentra la propiedad privada de los medios de producción y la explotación del trabajo asalariado. La ley fundamental de la producción capitalista consiste en obtener plusvalía. Son rasgos característicos del capitalismo la anarquía de la producción, las crisis periódicas, el paro forzoso crónico, la miseria de las masas, la competencia, las guerras. La contradicción básica del capitalismo –entre el carácter social del trabajo y la forma capitalista privada de la apropiación– se expresa en el antagonismo entre las clases básicas de la sociedad capitalista, el proletariado y la burguesía. La lucha de clases del proletariado, que palpita en toda la historia del capitalismo, toca a su fin con la revolución socialista. Los elementos fundamentales de la superestructura correspondiente a la base capitalista son las instituciones políticas y jurídicas y el sistema de la ideología burguesa. La igualdad eolítica formal proclamada por los ideólogos del capitalismo queda reducida a la nada en virtud de la desigualdad económica: todo el aparato estatal, a la vez es idóneo para excluir de la vida política a las masas trabajadoras. Surgido en el siglo [58] XVI, el capitalismo desempeñó una función progresiva en el desarrollo de la sociedad alcanzando una productividad del trabajo sensiblemente más elevada que la del feudalismo. Al acercarse al siglo XX, entra en su estadio superior y ultimo, el del imperialismo, que se caracteriza por el dominio de los monopolios y de la oligarquía financiera. En ese estadio, alcanza amplia difusión el capitalismo monopolista de Estado, que acentúa de manera inaudita el militarismo y aúna el poder de los monopolios con la fuerza del Estado. La Primera Guerra Mundial y la Gran Revolución Socialista de Octubre señalan el comienzo de la crisis general del capitalismo. La Segunda Guerra Mundial y las revoluciones socialistas en varios países de Europa y Asia han señalado la segunda etapa de dicha crisis. Actualmente, en el desarrollo de la crisis general del capitalismo, se ha iniciado una nueva etapa, cuya particularidad estriba en que dicha crisis deja de estar vinculada a la guerra mundial. La descomposición del capitalismo se revela más fuerte que en ninguna otra parte en los Estados Unidos, principal país del imperialismo moderno, país que se ha convertido en el de la economía militarizada más monstruosa y del paro forzoso crónico. «El capitalismo moderno es hostil a los intereses vitales, a las tendencias progresivas de toda la humanidad» («Documentos del XXII Congreso del P.C.U.S., pág. 343). Con el capitalismo llega a su término la prehistoria de la humanidad. |