Conjunto de los complejos procesos que forman los nexos temporales en la corteza de los grandes hemisferios cerebrales. La doctrina de Pávlov acerca de la actividad nerviosa superior pone de manifiesto la función específica de la actividad nerviosa, función que hace posible la amplia adaptación de los organismos altamente desarrollados a las variables condiciones del medio circundante. La actividad nerviosa superior se basa, fundamentalmente, en los reflejos condicionados, adquiridos por el organismo a través de su experiencia individual. La actividad nerviosa superior de los animales se halla limitada al reflejo directo de los influjos exteriores; mediante el primer sistema señalizador. En cambio, el hombre utiliza ante todo el segundo sistema de señales, más elevado, en el cual la actividad refleja se efectúa de manera mediata a través del lenguaje. La palabra, el lenguaje, permite al hombre reflejar la realidad de manera más profunda, generalizada, en forma de conceptos abstractos y de complejos razonamientos. La doctrina relativa a la actividad nerviosa superior ha hecho posible descubrir la base fisiológica y las leyes de la actividad psíquica (Actividad psíquica). Ayuda a comprender el origen y el desarrollo de la conciencia humana, confirma el acierto de la tesis filosófica materialista según la cual la conciencia es una función de la materia altamente desarrollada: del cerebro. |